Vivimos, tal vez, uno de los momentos más alarmantes de la historia humana. La invasión rusa a Ucrania acerca la posibilidad de un conflicto nuclear debido, más que nada, a las irresponsables bravatas de Vladimir Putin ante el fracaso de su “operación militar” que iba a durar menos de una semana. Los desastres políticos hacen historia, como es el caso del Reino Unido, donde la primera ministra, Liz Truss, dimite, por su abrumadora ineptitud, tras sólo seis semanas en el cargo, lo que la convierte en la primera ministra de menor duración en la historia del Parlamento, precipitando a su país a una crisis económica y de confianza sin paralelo. Hay hambrunas en Sudan, sangrientas protestas en Irán, la lista es casi interminable.
Mientras tanto, en nuestro país se acerca ya la fecha definitiva para votar en estas cruciales elecciones de medio término. Muchas cosas están en juego. El derecho de la mujer de planear su familia, negándole la posibilidad de un aborto debido a consecuencias graves de salud, a incestos y violaciones. La amenaza de que se elimine el Seguro Social y Medicare y que se reduzca el precio de los medicamentos. En Georgia, Herschel Walker, el candidato republicano a senador respondió así al pedirle su opinión sobre el Cambio Climático “¿Qué aquí no tenemos muchos árboles? Y hablando de la evolución y de que el hombre evolucionó a partir de los simios, dijo: “Si eso es cierto, ¿por qué sigue habiendo simios? A ver, dígame. “ Él es, -se supone, un tenaz opositor a cualquier aborto, pero pagó por el aborto de una ex novia,
No muy lejos de estas absurdidades y mentiras está Marjorie Taylor Greene, la congresista republicana pro- Trump de Georgia, quien se ha autonombrado ser una “mini-yo de Trump, apoya las conspiraciones de QAnon, respalda la idea de ejecutar a los líderes demócratas, y posa constantemente con un rifle AR-15.
Tan solo estos ejemplos deben servir para que reaccionemos de inmediato y usemos el voto para evitar que perdamos ese preciado don que se llama, Democracia.
