Justicia en La Haya 

En el día 100 de los bombardeos mortales de Israel en Gaza, que se cumplieron el domingo 14 de enero el mundo fue escenario de masivas marchas para pedir el fin de los crímenes de guerra. Se multiplican de manera impresionante las manifestaciones, no sólo en el Medio Oriente y América Latina,  incluso en Europa,  Estados Unidos y Canadá, porque hoy la causa del pueblo palestino es la causa de la humanidad entera.  

Desde el 7 de octubre se han sufrido más de 25,000 asesinados en Gaza, 10 mil son niñas y niños, el 70 por ciento son mujeres, 400 médicos, 112 periodistas – y esto lo callan los grandes medios de desinformación – además de la muerte 140 funcionarios de la ONU ocurridas hasta el momento . El drama es intenso, de los 2.2 millones de habitantes de Gaza han desplazado a 1.9 millones y empujados al peligro y la hambruna.  

Hace 75 años, el 10 de diciembre de 1948 la Asamblea General de las Naciones Unidas estableció, por primera vez, los derechos humanos fundamentales que deben protegerse en el mundo entero. Se reconocen las garantías individuales: seguridad, igualdad, libertad de expresión y de reunión. Los derechos económicos y sociales: salud, alimentación, vestido, techo, educación, libre tránsito, trabajo, género, infancia. Los derechos políticos y los de los pueblos: soberanía, medio ambiente y paz. Hoy todos y cada uno de esos derechos se violan en Palestina, por parte de Israel. Que ha dejado a Gaza inhabitable luego de que se han bombardeado hospitales, ambulancias, carreteras, el abasto de agua, escuelas, barrios enteros,  ya. En la ONU, Estados Unidos vetó “el cese al fuego” en las reuniones del 18 de octubre y el 8 de diciembre de 2023 en el Consejo de Seguridad, mientras los pueblos del mundo por millones denuncian el genocidio, la mayoría de los gobiernos cierran los ojos ante el peor crimen contra un pueblo en el siglo XXI.  

Unos 20.000 manifestantes se manifestaron en Tel Aviv el 6 de enero en la plaza Habima, mientras que se celebraron concentraciones más pequeñas en Haifa y frente a la residencia privada del primer ministro Benjamin Netanyahu. Los manifestantes exigieron nuevas elecciones nacionales inmediatas y que el gobierno dé prioridad al regreso seguro de los cautivos israelíes retenidos por la resistencia palestina. Esta postura es vista como una condena de la continua agresión genocida israelí contra Gaza. 

La manifestación también recibió el apoyo de las decenas de miles de personas que han sido evacuadas de sus hogares en zonas cercanas a la Franja de Gaza y la frontera norte con el Líbano y de familiares de personas que murieron en los acontecimientos que siguieron al ataque inicial de Hamás el 7 de octubre de 2023. Además de intensificar su campaña asesina en Gaza y Cisjordania y sus ataques contra palestinos con ciudadanía israelí, Israel sigue amenazando con una guerra contra el Líbano y el movimiento de resistencia Hezbolá. 

Los movimientos de resistencia palestinos están unidos en su posición de que no habrá negociaciones con Israel sobre los cautivos o cualquier otra cosa hasta que haya un alto el fuego y las fuerzas israelíes se retiren de Gaza, entre otras cosas. La resistencia es firme en Palestina.  

Las familias de los 13 civiles israelíes asesinados en Be’eri el 7 de octubre están pidiendo al ejército israelí que investigue la causa de sus muertes, informaron los medios israelíes el 7 de enero. Las familias solicitan la investigación debido a la probabilidad de que la mayoría hayan sido asesinados deliberadamente por orden de un general israelí que ordenó que un tanque disparara contra una casa donde estaban cautivos por combatientes de las Brigadas Qassam de Hamas. 

La acción del 7 de octubre, fue una respuesta militar dirigida principalmente a los militares israelíes en territorio ocupado de Palestina y un golpe a Israel para romper el cerco que han establecido sobre Gaza desde 2006, también fue para mostrar la debilidad del ejército Israelí. Esta acción se desarrolló después de 75 años de matanzas todos los años contra los Palestinos y no solo de invadir su territorio, sino día a día , han derribado casas en Palestina para construir vivienda para colonos de Israel, además les cortan el agua y tienen un bloqueo en el que no dejan que entre casi nada en Palestina, al interior están sujetos -en su propio territorio- ha puestos de control en todos lados, es una cárcel a cielo abierto. El ataque se dirigió en primer lugar militar contra militares y tomaron 200 rehenes para tener poder de negociación (ya liberaron a 100). La cifra de 1,200 muertos la proporciona Israel y los medios de información hegemónicos controlados por Estados Unidos, no se sabe en realidad cuántos civiles murieron, ni se sabe cuántos israelitas murieron a causa la respuesta de Israel que se dedicó a disparar sin control y desorganizadamente matando compatriotas. Se tienen noticias de que para disparar a combatientes palestinos no les importó que hubiese bajas de civiles palestinos. El 6 de enero: Herzi Halevi, jefe del Estado Mayor General de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), anunció la decisión de formar un comité para investigar los fracasos militares que condujeron a la devastadora ofensiva de Hamás del 7 de octubre, y agregó que la decisión debería haberse tomado hace mucho tiempo, ciertamente no tres meses después del inicio de la guerra. Dentro de esta investigación los familiares de los muertos civiles, exigen esclarecer las circunstancias de sus muertes y si estas fueron a causa del fuego del ejército de Israel. 

Ante esta situación el 29 de diciembre, Sudáfrica presentó una demanda contra el régimen israelí ante la CIJ por “actos de genocidio contra el pueblo palestino en Gaza” durante la guerra en curso, hasta ahora, el caso de Sudáfrica ha sido respaldado oficialmente por los 57 miembros de la Organización de Cooperación Islámica (OCI), incluidos Maldivas, Namibia y Pakistán Irán, Irak, El Líbano, y Arabia Saudí, así como Malasia, Turquía, Jordania, Bolivia y Venezuela. 

Denuncia Sudáfrica que este crimen pisotea las leyes internacionales e Israel se niega a cumplir con las resoluciones 242 de 1967 y 2334 de 2016 y ocupa territorios palestinos y desconoce al Estado de Palestina .  

Tras más de tres meses de agresiones Israel apoyado por EU no han logrado doblegar la resistencia palestina y han optado por atacar incluso a los negociadores, recientemente en El Líbano fue asesinado un negociador por la paz Saleh al-Arouri, de 57 años, jefe adjunto de la Oficina Política de Hamás que ayudó a establecer el acuerdo de intercambio de prisioneros Shalit en 2011 y estaba en el centro de las negociaciones” llevadas a cabo por Qatar y Egipto. Este asesinato revela la intención israelí de cerrar el paso a las pláticas y continuar con sus ataques en Gaza y ahora también en Cisjordania. 

El gobierno de Israel ha bombardeado con más de 65,000 toneladas de bombas los habitantes de Gaza, lo que equivale a 3.5 bombas atómicas. Por cada persona en Gaza, Israel ha lanzado casi 30 kilos de bombas. 

El jueves 11 de enero, se abrió en la Corte Internacional de Justicia en La Haya la primera vista del juicio contra Israel, acusado por Sudáfrica de genocidio. El escrito de 84 páginas de Sudáfrica sostiene que los bombardeos y el asedio de Israel violan la Convención de 1948, que define el genocidio como “actos cometidos con la intención de destruir, total o parcialmente, a un grupo nacional, étnico, racial o religioso”. 

Israel busca disuadir a los jueces del tribunal de La Haya, la Corte Internacional de Justicia (CIJ) que no existe el genocidio en sus acciones. En apoyo a Netanyahu, Biden ya desestimó el caso que presenta Sudáfrica declarándolo “infundado, contraproducente y sin base alguna”. Sin embargo el escrito comprueba la acusación de genocidio, presenta nueve páginas de declaraciones de líderes israelíes que muestran una clara intención genocida, incluidas declaraciones del Primer Ministro Benjamín Netanyahu, importantes miembros del gabinete, el Presidente Isaac Herzog y muchos comandantes militares israelíes en servicio y en retiro. Giora Eiland, asesora del ministro del consejo de guerra , Benny Gantz, ha definido con claridad el objetivo de Israel:: “debemos crear condiciones para que la vida en Gaza se vuelva insostenible”. Para mayor abundamiento un portavoz militar afirma: “desde el principio nuestro objetivo ha sido infligir el máximo daño a los palestinos”. Isaac Herzog sugiere que toda la población civil es un objetivo militar legítimo , mientras que Netanyahu se refiere a los palestinos como » Amalek «, un enemigo bíblico. (En el Antiguo Testamento, Dios ordena a los israelitas aniquilar a los habitantes de Amalek, “dando muerte a hombres y mujeres, niños y recién nacidos”). Una de las principales disposiciones de la Convención sobre el Genocidio es la prohibición absoluta de la incitación al genocidio. Los políticos y comandantes militares más importantes de Israel indiscutiblemente han violado ese artículo de la convención. Israel ha logrado “crear condiciones que no permiten la supervivencia de la población”. El objetivo de la Convención sobre el Genocidio de 1948, redactada inmediatamente después de la Segunda Guerra Mundial y el Holocausto nazi, no era solo castigar a quienes cometen genocidios sino detener este horrible crimen, así que la. Corte Internacional de Justicia no debería adoptar una postura de esperar y ver qué pasa, Un fallo de genocidio del tribunal impondrá obligaciones a los estados aliados de Israel: estos deberían negarse a ayudar en el genocidio y dejar de proporcionar armas y dar cobertura diplomática. La administración Biden ha pasado por alto al Congreso para acelerar el suministro de armas, que están arrasando indiscriminadamente zonas civiles. La embajadora de Israel en el Reino Unido, Tzipi Hotovely, ha aparecido regularmente en los medios británicos haciendo declaraciones genocidas. La semana pasada, cuando un entrevistador señaló que parecía estar pidiendo la destrucción de toda Gaza – cada escuela, mezquita y hogar–, respondió: “¿Tiene otra solución?” Todo el genocidio debería cesar inmediatamente y cualquier intento de hacer cumplir una sentencia sobre genocidio será bloqueado por la administración Biden a través del Consejo de Seguridad de la ONU. (Jobathab Cook 10 de enero observatoriocrisis.com

Después de demandar a Israel ante CIJ por genocidio en Gaza, abogados de Sudáfrica preparan demanda contra cómplices de crímenes israelíes, EE.UU. y Reino Unido. 

Cerca de 50 abogados de Sudáfrica están preparando una demanda separada ante tribunales civiles contra los gobiernos de Estados Unidos y el Reino Unidos para que los dos países sean juzgados por complicidad en los crímenes de guerra del régimen israelí contra el pueblo de la Franja de Gaza. 

El abogado Wikus Van Rensburg, que ha estado escribiendo cartas a varios países y a la Corte Internacional de Justicia (CIJ) durante las últimas semanas exigiendo que el régimen de Israel y sus partidarios sean procesados, ha comenzado los preparativos para presentar esta demanda contra los dos países occidentales en colaboración con abogados de Estados Unidos y Reino Unido, con los que ya está en contacto. (Jobathab Cook 10 de enero observatoriocrisis.com). 

Esperemos que los jueces del CIJ actúen con justicia y prontitud. Queremos paz y que la gente viva tranquilamente en su propia tierra sin agresiones extranjeras. El mundo se moviliza por el ¡alto al fuego! observa y exige que termine este crimen contra todo el pueblo palestino.

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