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Si el hombre que te gusta te mira indiferente, si tu novio rompió contigo, o lo que es peor, tu esposo te ha abandonado…mujer, ¡no es el fin del mundo!
En alguna época de nuestra vida, la mayoría de las mujeres hemos tenido un rechazo sentimental y sentimos que eso es el fin del mundo.
Ese rechazo le ha ocurrido tanto a las mujeres feas, como a las que tienen un cuerpo escultural, un rostro de “ángel”, o un carácter fantástico. Y es que no importan los atributos físicos o las virtudes que tenga una mujer; cuando un hombre decide ignorarla es porque NO LE INTERESA, ni aunque ella se ponga como “La Maja Desnuda”, podrá seducirlo.
Estas mujeres sintiéndose víctimas del destino, las invaden un enorme complejo de inferioridad, pues creen que no son capaces de que alguien las ame.
En el mundo existen mujeres que hacen de su vida una tragedia griega, se enamoran de hombres que no les corresponden. Y es así, como algunas llegan a pensar que son seres sin encantos, y creen que son dignas de estar encerradas en un convento. A pesar de ser mujeres atractivas, se sienten desoladas por ese rechazo masculino.
El rechazo del hombre amado debe servirle a una mujer para poner los pies sobre la tierra y aceptar la realidad, claro, siempre y cuando tu hombre sea honesto y te diga la verdad por muy dura que sea. Algunas no aceptan ese rechazo, y esperan un milagro.
Desean que, de la noche a la mañana, cambie de manera de pensar y se enamore más de ellas. Otras, cambian de personalidad, de manera de vestirse, de maquillarse, para que él se dé cuenta de que existe; y otras despechadas, tratan de darles celos…. que El, no va a sentir ni a importarle en ningún momento.
Conocí el caso de una señora, su esposo le pidió que se separaran por un tiempo, (después de tener tantos problemas en su hogar). El ya no la quería y no quería seguir a su lado.
Aunque está sufriendo, la señora acepta. En ese tiempo se esmeró en embellecerse. Hizo dietas, renovó su ropero, se cambió su peinado…todo por esperar el reencuentro.
El día que el esposo regresó, sin notar los cambios favorables de su esposa, sin más, ni más, le pidió el divorcio.
¿Como es posible que esto me ocurra a mí? Desesperada, gritando, llorando, sufriendo, y sintiéndose despechada por el abandono de su esposo, se propuso salir con el primer hombre que se le presentara en su camino, para mostrarle a su ex, y así misma, que, a pesar de su rechazo, ella podía ser deseada por otro hombre.
Es verdad, que el impacto del rechazo, es como que te echan un jarro de agua fría para la vanidad femenina; que deja a una mujer dolida y muy deprimida. Por eso, para evitar que te hieran, debes de ser más observadora y menos emotiva; es decir, usar un poco más la cabeza para controlar el corazón. Observa estos detalles que en algún momento te ayudarán.
Nunca te enamores platónicamente de un hombre que no se voltea para mirarla.
Si tú eres insegura y tienes muchos complejos, no te entusiasmes con un “Don Juan” para que te haga brillar, pues él te abandonará en un dos por tres.
Si en verdad quieres formalizar una relación y quieres enamorarte, fíjate en un hombre que tenga afinidades contigo, que tenga la misma cultura, educación, que sea sincero, cariñoso y amable. Huye de los egoístas y tacaños.
No te obsesiones en buscar un sustituto a la fuerza, pues puedes comprometerte con alguien que realmente no te conviene. (Esto le pasó a la señora, quien ya va por el tercero, y aún no encuentra la felicidad).
Con tranquilidad olvidarás ese rechazo, y encontrarás el verdadero camino a la felicidad.