Los seres humanos nos diferenciamos de las demás especies debido a que podemos razonar en todo lo que hacemos, entre ello se encuentra el razonamiento e identidad sexual. Con el tiempo ha ido cambiando y evolucionando debido a que también somos seres naturalmente curiosos y muy despiertos hacia aquello que en un tiempo fue tabú: el sexo.
Hoy en día, el sexo, y desde algún tiempo, ya no es un tabú. Desde muy jóvenes logramos sentirnos y vernos como seres sexualmente activos. Es lo más natural de la vida. Por esto, se empieza a experimentar, pero, ¿qué es lo que se logra a la larga y a qué nos exponemos?
Bien sabemos que la relación sexual es un tema de mucha curiosidad para los adolescentes Yo diría que es el más importante para cualquier joven, además del hecho de buscar pareja, por lo cual comienzan a aventurarse en ese mundo interesante y a conocer más de ello.
Si lo vemos fríamente, nos daremos cuenta de que la adolescencia actual se encuentra bastante confundida y, por lo tanto, cometen errores con respecto al sexo. Por esta razón, se debería orientar a los hijos dentro del hogar, de la madre o el padre al hijo o hija.
En estos tiempos, hablar de sexo es lo mas natural en la juventud. Los jóvenes se sienten orgullosos de saber cosas que sus padres quizás ignoraron en su tiempo. Es bueno, claro que sí, hasta que se meten en algún problema relativo a ello. Es importante estar pendientes de los menores de edad.
Los jóvenes tienen todo el derecho de disfrutar y vivir plenamente la sexualidad y saber los riesgos que conlleva. Asimismo, estar protegidos ante ello: buscando información de cómo cuidarse antes, durante y después de tener sexo, para no caer con enfermedades o en un posible embarazo.
Si bien este tema puede parecer repetitivo y fastidioso para algunos, considero que es muy importante recalcarlo. Siempre hay niños y niñas creciendo y llegando a la pubertad, que es cuando comienzan a descubrir sensaciones en su cuerpo.
En el trayecto de mi vida, incluso en mi familia ha pasado, que he conocido jovencitos que fueron padres a temprana edad, sin planearlo y sin ninguna responsabilidad. Siempre pensé, ¿era eso lo que ellos querían? Pero, no se puede retroceder, los niños no son culpables de cómo los trajeron a este mundo.