Al menos 53 personas fueron asesinadas este viernes a tiros por miembros del grupo yihadista Estado Islámico (EI). Las víctimas se encontraban recogiendo trufa en la provincia de Homs, en el centro de Siria, informó la agencia oficial de noticias siria SANA.
Todas las víctimas murieron por disparos en la cabeza. Mientras tanto, otras cinco personas que sobrevivieron presentan heridas de diversa consideración causadas por impactos de metralla, dijo a SANA, Walid Ode, director del Hospital Nacional de Palmira, adonde fueron trasladadas.
Los atacantes asaltaron al grupo de recolectores a las afueras de la localidad de Al Sukhna. Los atacantes también prendieron fuego a sus vehículos, de acuerdo con uno de los supervivientes. El Observatorio Sirio de Derechos Humanos, una ONG con sede en el Reino Unido y una amplia red de colaboradores sobre el terreno, confirmó el balance de muertos en un comunicado. En el texto aseguran que siete de ellos eran miembros del Ejército sirio.
Este es el segundo incidente que involucra a recolectores de trufa ocurrido en menos de una semana. El pasado domingo el EI secuestró a otro grupo de 75 personas en una zona diferente de la misma provincia. Los terroristas asesinaron a al menos 16 en los días posteriores al rapto, mientras que 25 fueron puestos en libertad y el resto continúan en paradero desconocido, según el Observatorio.