Los países europeos deben poner en marcha con urgencia una respuesta rápida y concertada a los brotes de sarampión, demandó la Organización Mundial de la Salud (OMS) ante el auge de ese virus.
El año pasado Europa registró más de 58 mil contagios en 41 de los 53 Estados miembros de ese continente, lo que provocó miles de hospitalizaciones y 10 muertes relacionadas con esa enfermedad.
Las últimas cifras de 2023 representan un rápido aumento en comparación con los tres años anteriores, y un riesgo para cualquier persona que no esté protegida. “Se necesitan claramente esfuerzos sostenidos para evitar que los casos de sarampión sigan aumentando en 2024”, dijo la OMS, que considera que la pandemia de Covid-19 dio lugar a una importante acumulación de niños susceptibles que no recibieron sus vacunas sistemáticas contra esta y otras dolencias prevenibles”.
Los casos en Europa se dispararon en 2023 y fueron notificados, incluso, en países en los que estaba declarado eliminado como enfermedad endémica.
“Mientras el virus se sigue propagando en muchas partes del continente, la detención a tiempo y una respuesta rápida son determinantes para prevenir una mayor escalada y asegurar el progreso hacia la eliminación de esta enfermedad altamente contagiosa”, señaló el director de OMS-Europa, Hans Kluge.
Este resurgimiento de la dolencia, para la que no hay tratamiento específico y que puede tener graves complicaciones tales como ceguera, encefalitis, diarrea aguda, infecciones del oído y neumonía, se atribuye en gran medida al retroceso de la cobertura de inmunización en los países entre 2020 y 2022.
La OMS en Europa señaló que, en varios países de la región se iniciaron campañas de inmunización sistemática, mientras apoya a las naciones con grandes brotes a investigar, identificar y vacunar a contactos susceptibles de desarrollar la enfermedad.