Batallones en lugar de grupos de combate y “muchas más tropas” en del flanco oriental de la OTAN es la principal reivindicación con la que los países de la región vecina a Ucrania acudirán a la cumbre de la Alianza Atlántica convocada para el 28 y 29 de junio en Madrid.
Así lo acordaron los Gobiernos del llamado “B-9”, formado por los nueve países del este del territorio de la OTAN, en una reunión celebrada en Bucarest para armonizar sus posiciones de cara a la próxima cita en España.
Su principal reivindicación allí será que la Alianza eleve a la categoría de batallones los grupos de combate que la OTAN ya tiene en la parte del continente más afectada por el expansionismo militar ruso.
“Queremos que los grupos de combate sean elevados al nivel de brigada en los países del flanco oriental, de manera que el número de tropas sea mucho mayor”, dijo el presidente de Polonia, Andrzej Duda, al término de esta cumbre extraordinaria.
Tal y como explicó Duda, los batallones están compuestos por unos tres mil soldados, mientras que los grupos de combate están formados por alrededor de un millar de efectivos cada uno.
En 2017, la OTAN creó grupos de combate en Polonia, Estonia, Lituania y Letonia.
La invasión a gran escala de Ucrania por parte de Rusia ha llevado a la Alianza a crear grupos de combate también en Bulgaria, Hungría, Rumanía y Eslovaquia.