Arabia Saudita reducirá la cantidad de petróleo que envía a la economía global, dando un paso unilateral para apuntalar el precio del crudo a la baja después de dos recortes anteriores al suministro por parte de los principales países productores en la alianza OPEP+ no lograron impulsar aceite más alto.
El recorte saudí de 1 millón de barriles por día comenzará en julio y se produce cuando los otros productores de la OPEP+ acordaron en una reunión en Viena extender los recortes de producción anteriores hasta el próximo año.
Llamando a la reducción una “piruleta”, el ministro de Energía de Arabia Saudita, Abdulaziz bin Salman, señaló en una conferencia de prensa que “queríamos congelar el pastel”. Dijo que el recorte podría extenderse y que el grupo “hará lo que sea necesario para traer estabilidad a este mercado”.
Es probable que el nuevo recorte haga subir los precios del petróleo a corto plazo, pero el impacto posterior dependerá de si Arabia Saudita decide extenderlo, afirmó Jorge Leon, vicepresidente senior de investigación de mercados petroleros de Rystad Energy.