La experta en viviendas, Rosalba González, indicó en una entrevista que el lugar está “manchado de rojo” pues se tiene que investigar cómo se establecieron los asentamientos en ese cerro.
“El caso de los deslaves no es una catástrofe fortuita, pues la zona está manchada de rojo debido al alto riesgo de remoción de masas, por lo que se tienen que fincar responsabilidades, pero no sólo del Gobierno, pues se tiene que saber cómo se permitió la formalización de algunos asentamientos”, sentenció Rosalba González.
En ese sentido, tomó en cuenta que se debe de investigar cómo se formalizaron ciertos asentamientos, pues para entregar el permiso es necesario realizar un estudio del suelo, el lugar y el nivel de inclinación del territorio.
Por lo que, indicó que, si está regularizados, tienen derecho a una vivienda. “Sin embargo, si no están permitidos, (los invasores de tierras) también cuentan con mecanismos de defensa en derechos humanos que los protegen, pues no pueden dejarlos así, sin un lugar donde vivir”.