El director del STC señaló que la circulación en avenida Tlahuac está suspendida parcialmente a partir del miércoles y y hasta que terminen los trabajos.
La rehabilitación del tramo subterráneo de la Línea 12 del Metro en puntos críticos será de abajo hacia arriba, se planea sustituir vías, durmientes, fijaciones, balasto y la sub base para que, al final los pasajeros tengan viajes más seguros, rápidos y confortables, estableció Guillermo Calderón Aguilera, director del Sistema de Transporte Colectivo (STC). El funcionario ofreció una conferencia de prensa en el andén de la estación Mexicaltzingo, donde dio a conocer el avance de las obras de reparación de esa parte, que terminarán a finales de año.
El túnel de la llamada Línea Dorada tiene una longitud de 11 y medio kilómetros y los puntos críticos se presentan en 4.5 kilómetros, concretamente entre las estaciones Atlalilco y Parque de Los Venados; los trabajos iniciarán con el retiro de vías, durmientes y balasto para renovar la sub base, que es una capa de grava y arena por concreto, a fin de hacerla más impermeable y resistente al paso de los trenes, los cuales seguirán siendo con ruedas de metal.
El director del STC agregó que 20 mil toneladas de balasto se tendrán que renovar para dar más rigidez a la vía, los rieles tendrán que ser de mayor dureza, porque las siete curvas que hay en dicho tramo son muy cerradas, lo que provoca un desgaste ondulatorio permanente en el riel y excesivo en las ruedas del tren. Mencionó que desde 2014, la firma Systra diagnosticó que las curvas de la Línea 12 tenían radios menores, por lo que recomendó tener un riel con mayor dureza, lo cual se hizo en el tramo elevado, no así en el subterráneo, por eso ahora el objetivo es cambiarlo.
“Al tener materiales de mayor dureza, mejorar los peraltes originales en las curvas y un mejor soporte en las vías, todo eso va a reducir el mantenimiento de la línea. Es una intervención mayor, por eso durará de aquí a finales de año”, definió Calderón Aguilera. Recordó que el mantenimiento de esa ruta del STC era diario, con un costo de 160 millones de pesos anuales, porque cuando se detectaba que rebasaba los límites, de milímetros y o décimas de milímetros, los rieles y ruedas de los convoyes se reperfilaban con una máquina para que quedarán integras y sin ondulaciones, pero confió en que, tras los trabajos, ya no habrá un desgaste tan pronunciado.