El mandatario invitó al grupo de periodistas en medio de la tensión que ha existido durante varias semanas por los asesinatos cometidos.
El presidente Andrés Manuel López Obrador concluyó este miércoles su conferencia de prensa matutina de manera anticipada para dar un recorrido por Palacio Nacional a algunos periodistas que integran el grupo de prensa de Presidencia de la República. El mandatario durante una hora mostró a la prensa los salones de Palacio Nacional y algunas de los espacios que fueron modificados para que él habite el recinto.
En el recorrido, López Obrador mencionó que el episodio más difícil de su gobierno fue atender la explosión de un ducto de gasolina ocurrida en Tlahuelilpan en enero de 2019, el cual produjo 137 muertos. El presidente recordó que se encontraba en Aguascalientes y se trasladó a Hidalgo. Subrayó que ese episodio fue muy triste. “Fue el momento más difícil y triste que he enfrentado”.
En el pequeño tour que dio López Obrador a los comunicadores, mostró la oficina presidencial y los salones Daniel Cabrera y el Ignacio Zaragoza. En el primer salón mencionó que se reúne con su gabinete para atender temas de seguridad y en el segundo trata los temas de salud por la pandemia. Este recorrido se da en medio de una fuerte confrontación que el presidente sostiene desde hace varios semanas con diversos periodistas de renombre, tras los señalamientos de presunto tráfico de influencias de su hijo mayor, José Ramón López Beltrán.
Durante el paseo, López Obrador dijo a los periodistas que habitar Palacio Nacional es “un gran honor”, aunque mencionó que no es lo mejor para su familia, pues habita un departamento. El mandatario fue cuestionado sobre las declaraciones del ministro presidente Arturo Zaldívar en torno a que recibió presiones en el gobierno del entonces presidente Felipe Calderón sobre el caso de la Guardería ABC, a lo que respondió que entonces había la mala costumbre de proteger y de que hubiera impunidad. Mientras añadió que lo mismo ocurrió en el caso de los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa.
El presidente mencionó que vivir en un lugar histórico lo inspira para mantener su lucha y mientras mostraba obras históricas mencionó que Guadalupe Victoria fue un caudillo rebelde. También mostró otras pinturas, una en particular del presidente Juárez, del cual comentó que fue un regalo del presidente John F. Kennedy al gobierno capitalino y está en préstamo a presidencia.