Las movilizaciones previstas en varias regiones de Bolivia contra el cierre del caso “fraude electoral” por los anulados comicios de 2019 reavivaron la polarización del país en la víspera de la celebración de su independencia.
La convocatoria a marchas se centró en Santa Cruz, La Paz y Cochabamba, las regiones bolivianas más pobladas, en medio de pedidos de renuncia del fiscal General, Juan Lanchipa, la libertad de los opositores considerados “presos políticos” y grescas con grupos oficialistas.
Las manifestaciones encabezadas por organizaciones cívicas y plataformas ciudadanas tuvieron una importante convocatoria en Santa Cruz y Cochabamba, mientras que en La Paz la movilización no pudo desarrollarse por un enfrentamiento con grupos afines al Gobierno.
En Santa Cruz, la mayor región de Bolivia y la más poblada, el Comité Cívico encabezado por su presidente, Rómulo Calvo, comandó una marcha por el centro de la ciudad que finalizó con una concentración en la plaza principal.