La precariedad salarial en Centroamérica es una de las principales razones de la emigración hacia Norteamérica, según un informe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
La crisis inflacionaria global se suma al problema, mermando un poder adquisitivo ya restringido en la gran mayoría de la región.
El nivel de salario mínimo en Centroamérica va desde los 213 dólares en Nicaragua, hasta los 640 dólares de Costa Rica y Honduras.
En la región, los insuficientes ingresos laborales y totales generados por los trabajadores y sus familias son el problema “más urgente” según la OIT.
El fenómeno del trabajador pobre, que es una persona que aún teniendo un empleo, incluso formal, puede encontrarse en situación de pobreza, es un problema en la región. En algunos países, la informalidad ronda el 50%.
Los salarios insuficientes empujan a muchos trabajadores a la informalidad o a la emigración en Centroamérica, y son una de las causas principales de la crisis económica en la región.