Las autoridades de Nicaragua anunciaron que el obispo ha sido acusado de conspiración y propagación de noticias falsas. Rolando Álvarez se encuentra en arresto domiciliario desde agosto, luego de haber sido detenido por la Policía.
El obispo de 56 años, es uno de los grandes críticos del régimen de Daniel Ortega, por lo que ha sido objetivo de represiones del gobierno. El Complejo Judicial Central de Managua indicó que a Álvarez se le imputa “por los delitos de conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional y propagación de noticias falsas a través de las tecnologías de la información y la comunicación en perjuicio del Estado y la sociedad nicaragüenses”.
La acusación contra el obispo fue presentada por el Ministerio Público ante el Distrito Penal de Audiencia de Managua. Un juez de está instancia nombró a un defensor público para Álvarez y programó una primera audiencia para el 10 de enero de 2023, previa a un juicio.