La Corte Interamericana de Derechos Humanos declaró este viernes a Colombia como responsable de la desaparición forzada de un ciudadano en 2002 en Medellín durante la “Operación Orión” conjunta entre Ejército y paramilitares.
La Corte continental, con sede en San José, determinó que Arles Edisson Guzmán fue desaparecido por parte de paramilitares del Bloque Cacique Nutibara (BCN), quienes “actuaban en conjunto con colaboración de las autoridades estatales” durante el gobierno del derechista Álvaro Uribe (2002-2010).
“Los crímenes cometidos por el BCN, en este caso, son atribuibles al Estado colombiano (…) debido a que los hechos se presentaron en un contexto comprobado de relacionamiento entre agentes estatales y grupos paramilitares en la fase de consolidación de la ‘Operación Orión'”, destacó la Corte en un comunicado.
La “Operación Orión” fue una operación militar y paramilitar realizada a finales de 2002 en la Comuna 13 de Medellín, una deprimida barriada donde operaban milicias relacionadas con guerrillas, paramilitares de derecha y bandas de narcotraficantes.
Bajo el pretexto de un plan de recuperación social, indicó la Corte, “se dieron desapariciones forzadas, detenciones arbitrarias, atentados contra la vida y la integridad personal, amenazas de muerte, y desplazamientos de los habitantes de la comuna indicada”.