El subterráneo del histórico ex Hospital Militar de Santiago de Chile funcionó como centro de detención en la dictadura de Augusto Pinochet. El espacio subterráneo del actual Hospital Metropolitano fue declarado como Monumento Histórico este viernes con una ceremonia con la presencia de diversas autoridades.
La medida fue tomada como un “hito histórico para la reparación” de las víctimas que transitaron por este lugar. El recinto fue utilizado entre 1973 y 1974 por la dictadura como lugar para llevar prisioneros políticos. El lugar fue identificado por la ciudadana Ximena Canales Fernández como centro de tortura y privación de libertad.
A la ceremonia asistió la ministra de Salud, Ximena Aguilar, la ministra de Cultura, Julieta Brodsky, y la ministra del Interior, Carolina Tohá. El padre de Tohá, José Tohá, fue uno de los miles de chilenos que sufrió y falleció encarcelado por parte de la dictadura, incluso habría permanecido encerrado en ese lugar.