El III Foro Mundial de Derechos Humanos, que desde este lunes debate sobre cooperación, justicia e igualdad en todo el mundo, reúne en Buenos Aires a miles de activistas y a figuras de la política internacional en un encuentro no exento de críticas por su presunta partidización.
Este foro, organizado por el Centro Internacional para la Promoción de los Derechos Humanos (CIPDH, organismo creado en 2009 por Argentina y la Unesco) y por la Secretaría de Derechos Humanos de Argentina, engloba unas actividades, entre debates, talleres, presentación de experiencias de lucha y movilización por los derechos humanos, actividades artísticas y culturales, con la participación de unas 12.000 personas de 98 países.
“El pueblo argentino ha hecho de los derechos humanos una verdadera política de Estado”, dijo el presidente de Argentina, Alberto Fernández, en el acto de apertura formal del foro.