Una madre de Atlanta dijo que los médicos de Children’s Healthcare of Atlanta salvaron la vida de su bebé recién nacido con un implante experimental especialmente diseñado para bebés.
Una madre del área metropolitana de Atlanta le da crédito a los médicos de Children’s Healthcare of Atlanta por salvar la vida de su bebé recién nacido después de que nació prematuramente con una frecuencia cardíaca peligrosamente baja. Implantaron con éxito un marcapasos experimental dentro del niño diseñado específicamente para bebés. Es uno de los pocos procedimientos realizados en todo el mundo.
Como enfermera y madre primeriza con un trastorno autoinmune, Amanda Brinker dijo que enterarse de que su hijo Connor tenía un bloqueo cardíaco completo cuando tenía 20 semanas de embarazo era el temor de cualquier padre. Una madre de Atlanta dijo que los médicos de Children’s Healthcare of Atlanta salvaron la vida de su bebé recién nacido con un implante experimental especialmente diseñado para bebés. “Entonces, la parte superior de su corazón, sus aurículas, y la parte inferior de su corazón, sus ventrículos, no se comunican en absoluto, lo que en un feto puede ser potencialmente mortal”, explicó.
Con un 50 por ciento de posibilidades de que pudieran llegar a término, Brinker dijo que ella y su esposo recurrieron a los médicos de Children’s Healthcare of Atlanta para recibir tratamiento, en forma de un marcapasos implantado en su pecho solo unos días después del nacimiento. “En cuanto a la decisión de ponerse el marcapasos, por más difícil que haya sido, ya sabes, no fue una gran decisión… esa era su mejor oportunidad, así que eso es lo que íbamos a hacer”, recordó.
El Dr. Robert Whitehill, electrofisiólogo del Children’s, dijo que tratan de evitar colocar marcapasos a los recién nacidos porque la única opción aprobada por la FDA es la misma que usaría un adulto y podría tener complicaciones debido a su tamaño. En el caso de Connor, necesitaba la cirugía para sobrevivir después de nacer a las 34 semanas.
“Desafortunadamente, su frecuencia cardíaca era muy baja y necesitaba que le administraran un medicamento de forma continua a través de una vía intravenosa para mantener su frecuencia cardíaca incluso hasta los 50”, dijo Whitehill. Los médicos del Children’s tenían otra solución en mente: un marcapasos mucho más pequeño para bebés que aún no había sido aprobado por la FDA, pero recibió el visto bueno para implantarlo con una autorización de uso de emergencia.
El dispositivo permite a los padres monitorear cualquier problema en el hogar, lo que Brinker dijo que fue un gran alivio para su familia. Whitehill llamó a la tecnología un cambio de juego para los médicos de atención pediátrica. “Si les preocupaba que algo anduviera mal con Connor, podrían enviarnos una revisión de su marcapasos desde casa. Es un gran avance para nuestros pacientes más pequeños”, apuntó.
Con casi 3 meses de edad, Brinker dijo que a Connor le está yendo bien y creciendo, algo por lo que está agradecida todos los días. “Está de vuelta en la pista regular de recién nacidos y nos mantenemos al día con todo lo que harías para un bebé normal”. Whitehill dijo que desde entonces han completado una segunda cirugía de implante de marcapasos infantil, que tampoco tuvo complicaciones, por lo que esperan realizar más procedimientos en el futuro.