Un hombre que dice ser pastor y su esposa están siendo acusados por el Departamento de Policía de Griffin de mantener encerradas a aproximadamente ocho personas con discapacidades mentales y/o físicas en el sótano de su residencia alquilada en Valley Road en Griffin.
Según un comunicado de prensa, Curtis Keith Bankston, de 55 años, y Sophia Simm-Bankston, de 56 años, estaban operando un “hogar grupal” o centro de atención personal sin licencia bajo la apariencia de una iglesia conocida como One Step of Faith 2nd Chance. Ellos eran los “cuidadores” de las personas que se encontraban en el sótano.
La situación salió a la luz después de que el Departamento de Bomberos de Griffin y el EMS Regional de Spalding fueran llamados a la casa de la pareja el 13 de enero debido a que una persona tuvo una convulsión. El personal de emergencia no pudo ingresar al sótano por la puerta porque estaba cerrada con llave y tuvo que acceder trepando por una ventana.
La investigación también reveló que los Bankston tenían el control de las finanzas, los medicamentos y los beneficios públicos de las personas discapacitadas. La policía también pudo determinar que se les negó los medicamentos a las personas y, en algunos casos, también atención médica.
Se llamó a la División de Servicios para Personas Mayores y al Departamento de Servicios Humanos y se colocó a las personas en una vivienda y cuidados adecuados.
Curtis Bankston fue arrestado por encarcelamiento falso y transportado a la cárcel del condado de Spalding. La investigación está en curso y se avecinan cargos contra Sophia Bankston, según el departamento de policía.