ELBERTON, Ga.- Una práctica médica del noreste de Georgia que desobedeció las pautas estatales y vacunó a los maestros del sistema escolar local ha perdido su atractivo para que se restablezca su suministro de vacunas COVID-19. Sin embargo, el Departamento de Salud Pública del estado dice que enviará más vacunas a otros cinco sitios en el condado de Elbert, al noreste de Athens en la frontera estatal de Carolina del Sur.
“Debido a que el Centro Médico de Elberton violó un componente crítico del acuerdo del proveedor, el DPH no puede rescindir la suspensión del Programa de Vacunas COVID”, escribió la Comisionada de Salud Pública Kathleen Toomey el viernes en una carta al Centro Médico de Elberton en una carta. informado por medios locales
El Departamento de Salud Pública del estado suspendió su suministro de vacunas al Centro Médico de Elberton hasta el 27 de julio después de que los funcionarios estatales supieron que la clínica había estado suministrando vacunas a los empleados del distrito escolar del condado de Elbert, de 3.000 estudiantes, desde principios de enero. Las autoridades dijeron que alrededor del 40% de los maestros, conductores de autobuses y otros empleados han sido vacunados.
Los funcionarios estatales actuaron en medio de las demandas de los líderes escolares de que los maestros se trasladaran al grupo actualmente elegible para recibir la vacuna. Las reglas estatales dicen que solo los trabajadores médicos, los trabajadores de emergencia, los residentes de hogares de ancianos y las personas de 65 años o más son actualmente elegibles para las vacunas. El gobernador republicano Brian Kemp dice que hay demasiada demanda para el suministro limitado actual de vacunas, incluso con un pequeño aumento en el suministro, sin permitir que cientos de miles de empleados de la escuela compitan por las vacunas.
Toomey escribió que envió a todos los médicos y asistentes médicos con licencia en Georgia una carta que identifica qué poblaciones eran elegibles para la vacunación. El 11 de enero, el estado amplió la elegibilidad a adultos de 65 años o más, personal policial y de bomberos. Anteriormente, solo eran elegibles los trabajadores de la salud y los residentes y el personal de los centros de atención a largo plazo.
El estado dice que el Centro Médico de Elberton puede usar el suministro restante para administrar una segunda dosis a las personas que ya están vacunadas. Pero dijo que recogerá las dosis restantes después de eso. Toomey prometió aumentar el suministro a otros cinco proveedores, incluido el Departamento de Salud del Condado de Elbert, el Hospital Elbert Memorial, un supermercado, una farmacia y un consultorio médico en Bowman.
La administradora de la práctica Brooke McDowell dijo que la clínica puede apelar nuevamente porque la primera apelación no incluyó toda la información relevante sobre el momento de las vacunas de los maestros. Ella dijo que los trabajadores de la salud y otras personas que inicialmente fueron parte de la primera ola de vacunaciones ya habían tenido la oportunidad de vacunarse antes de que el centro comenzara a vacunar a los empleados de la escuela.
El fiscal del condado de Elbert, Bill Daughtry, dijo que la comisión del condado le pidió que investigara y dijo que el condado puede intervenir en nombre del centro en una segunda apelación. Dijo que el centro comenzó a vacunar a los empleados de la escuela antes de que se actualizaran las pautas para dejar en claro que los maestros debían ser vacunados más tarde.
“No fue un acto desafiante. Fue un acto de buena fe ”, dijo. Las inyecciones de los empleados de la escuela después de que se enmendaron las pautas fueron solo para proporcionar las dosis de seguimiento necesarias para una efectividad total, dijo. Aunque las segundas dosis violaron la guía, habría sido “un desperdicio” no darlas y completar el proceso de inoculación, dijo.
Daughtry dijo que ninguna otra instalación en la ciudad tiene la capacidad de inocular al ritmo que lo hace el centro, y la mayoría de ellos administran dosis solo un día a la semana.
El representante estatal Rob Leverett, republicano por Elberton, emitió un comunicado el viernes diciendo que estaba preocupado por la suspensión “como todos mis compañeros del condado de Elbert”, calificándola de “extremadamente injusta” e “innecesariamente dañina” para los residentes en y alrededor del condado. Dijo que estaba trabajando con la oficina del gobernador para “resolver” la situación “y no poner en peligro la accesibilidad de la vacuna” a su comunidad.