Un muerto y 8 heridos deja tiroteo en una fiesta en Pensilvania. Al menos una de las víctimas está en estado grave. Aún no se ha detenido a ningún sospechoso.
Una persona murió y ocho resultaron heridas en un tiroteo durante una fiesta privada en un centro comunitario de Pensilvania.
La policía estatal del condado de Indiana señaló que agentes locales y servicios de emergencia respondieron a la emergencia en el Centro Comunitario Chevy Chase en White Township, a unas 50 millas (80 kilómetros) al noreste de Pittsburgh.
Nueve personas de entre 18 y 23 años recibieron disparos, incluido un hombre de Pittsburgh de 22 años que murió en el lugar. El teniente coronel George Bivens señaló que los investigadores creen que más de un tirador estuvo involucrado, pero se negó a decir cuántos eran.
“Se realizaron docenas de disparos dentro de los límites del edificio”, puntualizó Bivens. Se recuperaron muchos casquillos de bala y “múltiples armas de fuego”, junto con otras pruebas como ropa y teléfonos móviles, añadió.
Bivens aclaró, sin embargo, que los funcionarios creen que los eventos fueron “aislados para los asistentes a esa fiesta” y no creían que la amenaza estuviera dirigida a la comunidad en general.
Originalmente se llamó a la policía alrededor de la medianoche por un ruido excesivo proveniente del edificio. Se envió una unidad de la policía estatal para monitorear la situación y controlar la multitud si fuera necesario.
Al llegar, los miembros de la unidad policial escucharon disparos en el interior, pidieron refuerzos y luego escucharon más disparos y vieron a personas huyendo por puertas y ventanas. Algunos comenzaron a ayudar a los heridos que “se desplomaban afuera del edificio” y otros entraron y encontraron más víctimas, indicó Bivens. Ningún policía estatal resultó herido.
Se cree que más de 150 personas estaban presentes en el momento del tiroteo y que el edificio no era particularmente grande y habría estado “muy lleno” en ese momento. Cuando comenzó la balacera, los que estaban dentro “salieron del edificio de cualquier manera posible”, puntualizó. “La gente se zambulló a través de las ventanas, la gente corrió a través de las puertas, corrió a través de las barandillas del porche, tratando de alejarse de esa escena”.
Un hombre de 18 años de Chicago resultó gravemente herido y un hombre de 18 años de Florida también se encontraba entre las víctimas. Los demás baleados eran todos de Pensilvania: tres hombres de 19, 20 y 22 años; dos mujeres de 19 años; y una mujer de 23 años.
Los heridos fueron trasladados al Centro Médico Regional de Indiana. Seis permanecen hospitalizados, uno en estado crítico, mientras que dos fueron tratados y dados de alta.
Los funcionarios están rastreando quién alquiló el lugar para la fiesta, que requirió el pago de una tarifa antes de la entrada y quién fue el anfitrión del evento.
No hay sospechosos bajo custodia, por lo que piden que cualquiera que tuviera información que se comunicara con la policía del condado de Indiana. Crime Stoppers anunció una recompensa de 10.000 dólares por información sobre el caso que conduzca a arrestos y enjuiciamientos, y la Oficina federal de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos ha ofrecido hasta 5.000 dólares más.
Cabe destacar que el Centro Comunitario Chevy Chase, donde ocurrió el incidente, fue construido en 1971 por un grupo establecido en 1969 para luchar contra la pobreza y ayudar a los necesitados, según su sitio web. El centro dice que su misión es “cultivar, nutrir y sostener una cultura pacífica e inclusiva que una a la comunidad con positividad, diversidad, inclusión, educación, nutrición y amor”.
El fiscal de distrito del condado de Indiana, Robert Manzi Jr., que figura en la junta directiva del centro, comentó que el centro proporciona “comidas y un ambiente comunitario para las personas necesitadas” y “ha servido como un lugar para ayudar a los miembros de nuestra comunidad durante muchas décadas”.
La directora ejecutiva Brandi Ports escribió en la página de Facebook del centro que los funcionarios están “orando por todos los involucrados” y que el establecimiento permanecería cerrado hasta nuevo aviso.
ALGUNOS HERIDOS SON UNIVERSITARIOS
La escena del tiroteo está a unas 2 millas (3 kilómetros) del campus de la Universidad de Indiana en Pensilvania. El vicepresidente de asuntos estudiantiles de la escuela, Thomas Segar, señaló que dos de los heridos son estudiantes y que los funcionarios estaban trabajando con sus familias para brindarles apoyo.
Las actividades en el campus se desarrollaban según lo previsto con una mayor presencia policial, dijo un funcionario de la universidad. “Entendemos que incidentes como estos son aterradores y pueden causar sentimientos continuos de miedo y preocupación”, mencionó Segar, antes de brindar información sobre apoyo y asesoramiento de salud mental.