La abogada Jenna Ellis se declara culpable de intento de subvertir las elecciones en Georgia. Con ella, son tres acusados los que llegan a acuerdo con fiscales. Donald Trump y los demás investigados se proclaman inocentes.
Jenna Ellis, abogada y destacada figura de los medios conservadores, llegó a un acuerdo con los fiscales y se declaró culpable de un cargo reducido por los esfuerzos para revertir la derrota electoral de Donald Trump en 2020 en Georgia.
Ellis, el cuarto acusado en el caso que llegó a un acuerdo de culpabilidad, fue portavoz de la campaña de reelección de Trump en el último ciclo presidencial. Asimismo, estuvo acusada junto al expresidente republicano y otras 17 personas de violar la ley estatal contra el crimen organizado.
Ellis se declaró culpable de un delito grave de complicidad en declaraciones y escritos falsos. Había estado enfrentando cargos de violar la ley antimafia de Georgia y de solicitar la violación del juramento por parte de un funcionario público.
Se levantó para hablar después de declararse culpable y, luchando por contener las lágrimas, dijo que no habría representado a Trump después de las elecciones de 2020 si hubiera sabido entonces lo que sabe ahora. Además alegó que confió en abogados con mucha más experiencia que ella, y que no pudo verificar que las cosas que le dijeron eran ciertas. Agregó que recuerda la experiencia con “profundo remordimiento”.
“Lo que no hice, pero debería haber hecho, señoría, fue asegurarme de que los hechos que los otros abogados alegaron como ciertos lo fueran en realidad”, indicó Ellis, de 38 años de edad. La declaración de culpabilidad de Ellis se produce pocos días después de que otros dos acusados, los abogados Sidney Powell y Kenneth Chesebro, se declararan culpables. Eso significa que tres personas de alto perfil responsables de impulsar impugnaciones legales infundadas a la victoria electoral del demócrata Joe Biden en 2020 han acordado aceptar la responsabilidad de sus roles en lugar de arriesgarse ante un jurado.
Ellis fue sentenciada a cinco años de libertad condicional junto con $5,000 en restitución, 100 horas de servicio comunitario, escribir una carta de disculpa al pueblo de Georgia y testificar con sinceridad en juicios relacionados con este caso.
Las primeras declaraciones y el castigo favorable (libertad condicional en lugar de prisión) podrían presagiar resultados similares para otros acusados que tal vez vean la admisión de culpabilidad y la cooperación como su mejor esperanza de indulgencia.
Aún así, su valor como testigos contra Donald Trump no está claro, dado que su participación directa en planes infundados sin duda los expondrá a ataques a su credibilidad y a dolorosos contrainterrogatorios en caso de que testifiquen.
El caso detalla una serie de acusaciones contra Ellis, incluida la de que ayudó a redactar planes sobre cómo interrumpir y retrasar la certificación del Congreso de los resultados de las elecciones de 2020 el 6 de enero de 2021, el día en que una turba de partidarios de Trump finalmente invadió la Capitolio de Estados Unidos.
Ellis también está acusada de instar a los legisladores estatales a nombrar ilegalmente a un grupo de electores presidenciales leales a Trump en una audiencia en Pennsylvania, y luego apareció con algunos de esos legisladores y Trump en una reunión sobre el tema en la Casa Blanca.
La acusación además puntualiza que ella también presionó a los legisladores estatales para que respaldaran a electores falsos proTrump en Georgia, así como en Arizona y Michigan.
CAMBIO DE PERSPECTIVA
Antes de su declaración, Ellis, que vive en Florida, se mostró desafiante y publicó en la red social X en agosto: “Los demócratas y el fiscal del condado de Fulton están criminalizando el ejercicio de la abogacía. Estoy resuelta a confiar en el Señor”.
Pero desde entonces ha sido más crítica con Trump, comentando en una radio conservadora en septiembre que no volvería a votar por él, citando su “tendencia maligna y narcisista a decir simplemente que nunca ha hecho nada malo”.
Junto al exalcalde de Nueva York, Rudy Giuliani, Ellis fue una voz líder en los esfuerzos de la campaña de Trump para anular las elecciones de 2020, apareciendo frecuentemente en televisión y medios conservadores para decir mentiras sobre un fraude generalizado que no ocurrió y difundir información errónea y teorías de conspiración.
Fue censurada en Colorado en marzo después de admitir que hizo repetidas declaraciones falsas sobre las elecciones de 2020.