Victoria Nuland, la tercera diplomática de mayor nivel en Estados Unidos y blanco frecuente de críticas por sus opiniones intransigentes respecto de Rusia y sus acciones en Ucrania, se jubilará y dejará su puesto este mes, informó este martes el Departamento de Estado.
La diplomática de carrera que trabajó como subsecretaria de Estado para Europa en el gobierno de Barack Obama, pero se retiró tras la elección de Donald Trump como presidente, regresó al gobierno como subsecretaria de Estado para asuntos políticos del gobierno de Joe Biden.
Fue candidata para suceder a Wendy Sherman como secretaria de Estado adjunta y se desempeñó como subsecretaria interina desde la jubilación de Sherman hace siete meses, pero perdió una batalla interna de personal del gobierno cuando Biden nombró a Kurt Campbell al puesto número dos. Campbell asumió el cargo este mes.
Nuland fue la embajadora de Estados Unidos en Moscú en la tumultuosa década de 1990 y estuvo en la ciudad durante el intento de golpe de Estado contra el expresidente ruso, Boris Yeltsin.
Posteriormente fue embajadora de Estados Unidos en la OTAN antes de desempeñarse como vocera del Departamento de Estado de la exsecretaria de Estado Hillary Rodham Clinton en el primer periodo de gobierno de Obama.
Como vocera del departamento y luego como subsecretaria de Estado para Europa, Nuland provocó la ira de muchos líderes rusos por su explícita defensa de Ucrania, particularmente después de que Rusia anexó la península ucraniana de Crimea en 2014 a su territorio.