El día de hoy la Corte Suprema de los Estados Unidos ha decidido anular el fallo que data de 1973. En este se afirmaba que el aborto era un derecho constitucional. La decisión es el resultado de una insistencia de décadas de los detractores del aborto para que cada estado lo regule.
Gracias a este fallo, la regulación del aborto pasará a manos de cada estado. Hasta el momento más de la mitad de estados han promulgado leyes que prohíben o limitan el acceso al aborto. Algunas de estas leyes facilitarían prohibir el aborto lo antes posible. De hecho, serían otros 4 los estados que podrían prohibir la práctica sin tener alguna barrera constitucional.
El juez de la suprema, Samuel Alito, afirmó que el fallo tiene un razonamiento débil y que lo único que ha generado es inflar el debate y profundizar la división. Mientras tanto, los jueces Stephen Breyer, Sonia Sotomayor y Elena Kagan lamentaron al decisión de la mayoría. Los tres jueces han anunciado que disienten de la decisión y lo lamentan por lo millones de mujeres que hoy han perdido una protección constitucional fundamental.