Un crucero de Royal Caribbean no pudo ingresar a dos países por un brote de COVID-19 en las personas a bordo. Más específicamente, 55 miembros de la tripulación y pasajeros completamente vacunados contrajeron el virus pocos días después que el barco zarpara de Fort Lauderdale, informó el miércoles el Miami Herald.
Se trata del ‘Odyssey of the Seas’, el cual no pudo ingresar a Curazao y Aruba, permaneciendo en el mar hasta su regreso planificado el 26 de diciembre a Fort Lauderdale.
Las autoridades de salud de Curazao negaron su ingreso debido al alto porcentaje de personas infectadas, informó el Curacao Chronicle. Hubo 51 casos positivos a bordo el miércoles por la mañana, según el Dr. Izzy Gerstenbluth, epidemiólogo nacional de Curazao.
“Con este número de contagios, ese porcentaje se ha superado y, por tanto, no estamos ansiosos por recibir a estas personas en la isla, y menos con las cifras actuales en la isla”, dijo Gerstenbluth.
Según Royal Caribbean, Odyssey of the Seas puede acomodar hasta 5.500 invitados más 1.600 miembros de la tripulación. No estaba claro si el barco estaba completamente lleno en este viaje.
El brote se produce días después de que al menos 48 personas a bordo del Symphony of the Seas de Royal Caribbean dieran positivo por COVID-19 cuando el crucero atracó en Miami, dijo la compañía.