Landon Parrott, de 19 años, de Ohio, confesó que dejó a su bebé a propósito para que este fallezca por el calor. El joven esta acusado de dos cargos por poner en peligro a un niño y otro por homicidio involuntario. Según su confesión, lo hizo para que el niño “no fuera una molestia mientras estuviera en la casa”.
Parrott habría dejado intencionalmente a su hijo por casi cinco horas dentro del vehículo. Luego, llevó al menor inconsciente al Hospital Unión de la Clínica Cleveland el jueves por la tarde. El padre dio un falso testimonio sobre lo ocurrido a los detectives, según confirmó el jefe de la policía de New Philadelphia, Michael Goodwin.
Un video de vigilancia, recogido por las autoridades, muestra como el joven deja al menor dentro del automóvil mientras la madre estaba trabajando. Ese día, la temperatura ambiente marcaba los 87°, lo cual significan unos 130° dentro del carro.
En su nuevo testimonio, Parrott afirmó que conocía los peligros de los autos calientes y aún así dejó al niño en el interior. El joven esta recluido en la cárcel del condado de Tuscarawas bajo una fianza de $250,000.