Julián Andrés Rosales Garzón, de 11 años, le ha hecho frente a un cáncer terminal que se ha expandido por casi todo su cuerpo. El menor viajó desde Colombia a Estados Unidos con la esperanza de que tratamientos más avanzados pudieran revertir los pronósticos, lo que lamentablemente no ocurrió.
En este contexto, el infante ha hecho un llamado a las autoridades estadounidenses y colombianas para facilitar el viaje de su padre. En este momento, Julián permanece con su mamá, Sindy Catalina Garzón, en el centro médico de Miami, Florida, Nicklaus Children.
La mamá del niño reconoce que las esperanzas se empiezan a agotar a medida que avanzan los días y ante lo que han dicho los médicos. “Ya no tiene opción de quimioterapia, porque tiene cáncer en casi todo el cuerpo, en la cabeza, el ojo, la mandíbula, los pulmones y en el hígado”, aseguró la mujer.