Un incendio inmenso que arrasa California y Nevada está generando un comportamiento de fuego extremo, con “remolinos de fuego” y condiciones peligrosas para los bomberos, dijeron las autoridades.
El incendio York, que es el mayor fuego del año en California, ha consumido 32.300 hectáreas hasta la mañana de este martes. El incendio comenzó el viernes en la cordillera de Nueva York de la Reserva Nacional de Mojave, en California, y el domingo cruzó las fronteras del estado de Nevada, cuando los vientos arreciaron bajo temperaturas abrasadoras.
Este lunes por la noche, los bomberos lograron apaciguar parte del incendio, que en la mañana del martes estaba controlado en un 23%.
“Anoche se realizó un vuelo de infrarrojos que permitió evaluar mejor el tamaño y la actividad del incendio”, declaró el martes el Servicio Nacional de Parques.
El incendio se encuentra entre las docenas de incendios forestales que arden en todo el país mientras algunas zonas se asfixian bajo un calor implacable, incluido uno que arrasa a ambos lados de la frontera entre EE.UU. y Canadá.
El incendio en la frontera entre los estados de California y Nevada sigue “creciendo rápidamente” y creando condiciones extremas que lo hacen más peligroso y difícil de controlar, según informaron los bomberos este lunes por la noche.
Los bomberos que luchan contra el fuego han visto remolinos de fuego: “un vórtice de llamas y humo que se forma cuando el calor intenso y los vientos turbulentos se combinan, creando una columna giratoria de fuego”, dijo el domingo la Reserva Nacional de Mojave.
A medida que el aire calentado por el fuego se eleva, el aire frío se precipita para ocupar su lugar, creando un vórtice giratorio que surge de un incendio y transporta humo, escombros y llamas, lo que en algunos casos también se conoce como “tornado de fuego”.
“Estos remolinos de fuego son similares a los remolinos de polvo, pero se asocian específicamente con el calor y la energía liberada por un incendio forestal”, dijo la Reserva Nacional de Mojave. “Pueden variar en tamaño desde unos pocos metros hasta varios cientos de metros de altura, y su velocidad de rotación puede variar ampliamente”.
Los remolinos de fuego pueden cambiar de dirección repentinamente, lo que los hace impredecibles y difíciles de anticipar, dijeron los funcionarios del servicio de parques.
Los grandes remolinos de fuego pueden tener la misma intensidad que un tornado. En 2018, el incendio Carr, en las afueras de Redding, California, generó un tornado de fuego tan destructivo que mató a ocho personas y arrasó varias casas. El incendio mortal tuvo vientos de más de 225 km/h, lo que equivaldría a un tornado EF-3, o el tercer tornado más intenso en la escala EF.
Las cuadrillas que luchan contra el incendio de York se enfrentan a temperaturas sostenidas superiores a 37,7 °C que están causando dificultades a los bomberos, que dependen cada vez más de los recursos aéreos.
La lucha por controlar el incendio York ha permitido que el humo se extienda hasta Nevada y el sur de Utah, según el resumen de incidentes del incendio. Se han registrado “lecturas elevadas de partículas” en el este de Las Vegas, Boulder City y Henderson, según un tuit del gobierno del condado de Clark, Nevada.
A medida que las condiciones cálidas y secas continúan, 64 grandes incendios activos están ardiendo a través de nueve estados, incluyendo 12 grandes incendios nuevos que fueron reportados el domingo, según informó el Centro Nacional Interagencias de Bomberos (NIFC, por sus siglas en inglés) este lunes.
Más de 11.500 bomberos forestales y otro personal están asignados a los incidentes en todo EE.UU., según la agencia.
Hasta el 31 de julio, 445.000 hectáreas se han incendiado en el país en 2023, según el NIFC, todavía muy por debajo de los 2,3 millones de hectáreas que se habían incendiado para finales de julio de 2022.