El padre de los migrantes asegura que ambos hermanos fallecieron en el desierto de Arizona cuando intentaban ingresar a Estados Unidos. Uno de los hermanos habría sufrido de una deshidratación, el traficante que los llevaba decidió abandonarlos para seguir su camino con el resto.
Los dos hombres salieron de natal Oaxaca, México, el 27 de mayo rumbo a Estados Unidos. Los dos migrantes han sido identificados como Edgar Mendoza Rodríguez, de 37 años, y Carlos Enrique Mendoza Santiago, de 23 años. El mayor dejó a cuatro huérfanos, mientras que el menor tenía dos hijos y su viuda esperaba un tercero.
El padre de los dos migrantes, Facundo Mendoza Nolasco, se comunicó el 2 de junio con el coyote que llevó a sus hijos para saber de su paradero. El traficante le admitió que en el desierto Carlos, el menor, habría sufrido de una deshidratación que no le permitía continuar.
El mayor, Édgar, habría preferido abandonar al grupo y quedarse con su hermano. Un funcionario del Consulado de México en Yuma, Arizona, le habría dicho a Mendoza que sus hijos fallecieron juntos abrazados.
Desde enero del 2021 han fallecido más de 1,000 migrantes tratando de cruzar ilegalmente a Estados Unidos. Solo el año pasado murieron o fueron reportados desaparecidos 728.