Por primera vez los latinos o hispanos serán catalogados como una raza o etnia y las personas de Medio Oriente o descendientes del Norte de África tendrán su propia casilla bajo los nuevos estándares de raza y origen étnico adoptados por el Gobierno del presidente, Joe Biden.
Hasta ahora los hispanos tenían una pregunta doble sobre su identidad: se les preguntaba si eran hispanos o latinos y después debían elegir una raza entre blanco, negro, indígena americano u otra.
El cambio emplea ahora una pregunta para raza y etnia y permite a las personas escoger todas las que apliquen a su identidad. Cada categoría tiene subcategorías con ejemplos que podrían aplicar, y dejando espacio para aquellos que no se mencionan.
La adición de la opción de Medio Oriente o del Norte de África, o MENA, permitiría que entre 7 a 8 millones de personas ya no tengan que identificarse como blanco u otro en el Censo y otras encuestas en las que se recopilan este tipo de datos.
Estos cambios son la segunda actualización del Gobierno federal, la última fue en 1997, a categorías para los datos de la población en Estados Unidos y busca capturar mejor la identidad multicultural en expansión del país.
“Estos estándares actualizados ayudarán a crear estadísticas federales más útiles, precisas y al día sobre raza y etnia”, dijo un funcionario de la Oficina de Administración y Presupuesto (OMB, en inglés) que habló a reporteros este martes bajo la condición de anonimato.