El equipo de Renato Tapia se impuso con un agónico gol a último minuto sobre el Granada de Luis Abram.
Como era de esperar, fue el Celta el que se hizo con el balón desde el inicio del encuentro (acabaría la primera parte con un 74 % de posesión). Con Renato Tapia como jugador ‘escoba’, hasta cinco celestes estuvieron siempre por delante del balón ante un Granada que, eso sí, tuvo pocos problemas para frenar al rival. En esta ocasión, Robert Moreno olvidó anteriores planteamientos ofensivos y armó un equipo con dos líneas de cuatro, dejando solo arriba a la dupla colombiana Luis Suárez y Carlos Bacca.
En la reanudación el ‘Chacho’ Coudet movió pieza dejando en el vestuario a Fran Beltrán y dando entrada a Denis Suárez para buscar más claridad de ideas y un último pase que lo aprovecharan Santi Mina o Iago Aspas. A la hora de partido también metió en el campo a Cervi por Nolito, pues el ovillo seguía enredado y sus jugadores eran incapaces de romper la cada vez más solida muralla del Granada, que esta vez tenía al peruano Luis Abram en el banquillo de suplentes y no ingresó. Cabe mencionar que Aspas erró un penal a los
Los últimos instantes fueron de un acoso constante del Celta en busca del gol, aunque el Granada pudo marcar en dos remates consecutivos de Soro y Luis Suárez que fueron despejados por Dituro. Todo parecía que el 0-0 permanecería inamovible en Balaídos cuando en el minuto 94 el balón llegó a Denis Suárez y el centrocampista, con un chut cruzado, superó a Aarón Escadell, dejando los tres puntos en Vigo en un partido que acabó ‘caliente’, con varias trifulcas y trabajo extra para el colegiado.