No es ninguna novedad decir que el Bayern Múnich se ha convertido, sin ningún tipo de discusión, en el dominador por excelencia de la Bundesliga.
Una competición que ha monopolizado por completo desde hace una década. Así las cosas, el conjunto dirigido por Julian Nagelsmann vuelve a presentarse como el rival a batir en el entorchado doméstico en Alemania. En lo que se refiere a la cita de este domingo, debería medir sus fuerzas con las del Wolfsburgo.
Sadio Mané no desperdiciaría la ocasión de perforar el fondo de las mallas de la meta de su rival, pero lo haría en posición antirreglamentaria.
Por tanto, su gol no campearía en el electrónico del Allianz Arena. Aun así, Jamal Musiala, la nueva joya de la corona del gigante bávaro, firmaría el 1 – 0 con un buen lanzamiento.
Antes del descanso, Thomas Muller desviaría lo justo la trayectoria de un golpeo de Joshua Kimmich para ampliar la renta de los suyos (2 – 0). Así las cosas, el Bayern impondría su ley ante el Wolfsburgo en Múnich.