El 26 de febrero es la fecha marcada para que Jake Paul y Tommy Fury se enfrenten finalmente después de una extensa rivalidad.
El 26 de febrero es la fecha marcada para que Jake Paul y Tommy Fury se enfrenten finalmente después de una extensa rivalidad. Pero esta podría no ser la última vez que ambos se vean las caras en el cuadrilátero. Ya no por su historia en sí misma, la cual puede dar para mucho más, sino porque así lo indica una cláusula en el contrato, según reveló recientemente «The Problem Child» mientras hablaba con los medios para promocionar el combate.
«Creo que hay una cláusula de revancha, sí. Está de mi lado«.
Paul señala que si pierde el enfrentamiento, tendrá una segunda oportunidad contra Fury. En cambio, por lo que apunta, si Fury pierde, no será así. Aunque el joven boxeador aclara que no tiene intención de utilizarla puesto que el objetivo es derrotar de una a su oponente (vía The MMA Hour).
“El chico es un novato, nunca ha peleado con nadie bueno. Ni siquiera ha peleado una pelea de ocho asaltos. Simplemente no tiene la experiencia que yo tengo, lo cual es una locura porque lo ha estado haciendo toda su vida, pero la gente lo llama boxeador profesional y lo respetan como boxeador profesional. Así que me encantaría quitarle ese título. Ni siquiera tendría que entrenar para esa pelea. Seguiría entrenando porque soy un profesional, pero no tendría que entrenar para pelear con él”.