¡Gracias por seguir acompañándome en este viaje de descubrimiento y reflexión! En la columna anterior les compartí la definición de Inteligencia Emocional Financiera ( la defino como la capacidad de gestionar emocional y financieramente el dinero para lograr vivir el estilo de vida que elegimos; en equilibrio y en coherencia con quienes somos y en equilibrio con nuestros vínculos con los demás).
Como ven, la parte central es identificar el estilo de vida que queremos. ¡Todo parte desde ahí! ¡Todo tiene sentido desde ahí! ¿De qué me sirve saber, por ejemplo, cómo invertir si no lo aplico a mi vida de manera coherente con lo que quiero? Por lo tanto, en la columna de hoy vamos a reflexionar sobre nuestro estilo de vida. Te invito a preguntarte ¿Qué estilo de vida elegís? ¿Qué es aquello que valoras mucho? ¿Cómo se vería tu vida siendo un éxito para vos en el plano familiar, social, físico, económico, laboral y espiritual hoy? ¿En 10 años? ¿En 30? ¿Cuáles son tus “no negociables”? ¿Qué es eso que sí o sí querés que sea parte de tu vida? En nuestro caso, brindarles una buena educación a nuestros hijos es fundamental.
Parecen preguntas sencillas y muchos creen saber las respuestas. Sin embargo, por mi experiencia trabajando con muchas personas y con parejas (es un ejercicio muy lindo para hacer primero individualmente y luego compartir en familia) suele ser muchísimo más complejo de lo que se cree.
¿Por qué? Porque hay personas que por miedo a tomar mayor conciencia de lo que realmente quieren, prefieren seguir como están, seguir en “piloto automático”, seguir “dormidas por la vida”.
Hay muchas personas, sobre todo las mujeres, que tienen miedo a salir de su “zona de confort”, miedo a dejar un trabajo en relación de dependencia, con un sueldo fijo, a arriesgarse a desarrollar el negocio de sus sueños, por ejemplo. Por detrás de ese miedo hay mucha inseguridad, mucha falta de confianza en que pueden generar los ingresos que desean y lograr lo que se propongan. Tienen miedo al fracaso y también miedo al éxito. ¡Sí, miedo al éxito! aunque a primera vista cueste creerlo. Ya voy a profundizar en este tema en otra columna.
¿Te ves reflejada en alguno de esos aspectos?
Ahora para profundizar aún más, te invito a que te contestes las preguntas imaginándote que vivís en un lugar donde nadie te conoce. ¿En qué tipo de vivienda te gustaría vivir? ¿En qué tipo de vehículo te gustaría transportarte? ¿Qué tipo de vestimenta te gustaría usar? ¿A dónde te gustaría irte de vacaciones? Nadie se entera, sólo vos…. ¿Cambian tus respuestas? Si cambian es porque quiza tu motivación para tener tal o cual casa, tal o cual auto o tal o cual cartera es para que “te vean” así. Tu motivación es más extrínseca que intrínseca como decimos en psicología. ¡Señal de alerta! Son tus sueños, es tu vida. ¿Así es como realmente la querés vivir? Mucho por reflexionar, mucho por profundizar en tu autoconocimiento.
¡Por eso es que el aspecto emocional es tan importante para vivir la vida que queremos! ¡Y lamentablemente en el colegio no recibimos ni educación emocional ni educación financiera! Entonces realmente muchas personas no cuentan con herramientas fundamentales tanto para gestionar sus emociones ni su dinero.
Pero nunca es tarde. ¡Siempre podemos aprender, crecer y cambiar! Como dijo Walt Disney, “Si lo puedes soñar lo puedes lograr” y yo estoy convencida de que así es. Si realmente querés vivir tu vida a tu manera lo podes lograr con un fuerte compromiso hacia vos y sobre todo con mucha perseverancia.
Te dejo este link a unos videos que subí a YouTube hace unos años atrás que te pueden ayudar a reflexionar sobre el estilo de vida que querés vivir: “Conectándome con mis sueños”
¡Contame! Escribime a info@valelaco.com o por IG a @valelaco
¡Muchas gracias! Hasta la próxima columna.
“Si desarrollar tu Inteligencia Emocional Financiera te es COHERENTE, ¡VALE!”