La ONU alertó de la situación de los civiles que permanecen en la ciudad ucraniana de Soledar, escenario de una ofensiva de fuerzas rusas, y aseguró que, ante los duros combates, las posibilidades de evacuarlos o suministrar asistencia son muy escasas.
Según cifras trasladadas por autoridades locales a la organización, unos 7.500 residentes continúan en las localidades de Soledar y Bakhmut, en el este de Ucrania y ambas son objetivo de bombardeos.
“Con viviendas e infraestructuras destruidas o muy dañadas, la gente está buscando cobijo en refugios y sótanos. Dada la dura lucha, la posibilidad de entregar asistencia o evacuar a los residentes que allí quedan es muy limitada”, explicó a los periodistas el portavoz de Naciones Unidas, Stéphane Dujarric.