Cientos de miles acudieron a la movilización lanzada por los sindicatos contra la reforma del sistema de pensiones. Esta reforma ha sido propuesta por el Gobierno del presidente Emmanuel Macron, y decidido a aprobarla a pesar del fuerte rechazo popular.
De acuerdo con los sindicatos solo en París unas 400,000 personas marcharon contra los planes del Gobierno. A nivel nacional, los sindicatos estiman que se logró sobrepasar el objetivo de dos millones de manifestantes, en tanto que el Ministerio del Interior rebajó la cifra a 1,1 millones.
Asimismo, algunos de los manifestantes causaron incidentes y destrozos por los que fueron detenidas 38 personas. Junto a las manifestaciones, además, hubo huelgas que se dejaron sentir de forma especial en sectores como el del transporte público. En este caso, el servicio funcionó con notable lentitud en los ferrocarriles y en las grandes ciudades.