Eric Holder Jr., de 33 años, fue declarado culpable de homicidio premeditado por la muerte del artista nominado al Grammy, ocurrida en 2019 en el sur de Los Ángeles.
Un juez de Los Ángeles sentenció este miércoles al hombre declarado culpable de matar a tiros al rapero Nipsey Hussle a 60 años de prisión sin derecho a una liberación anticipada, después de escuchar los testimonios del enorme costo que tuvo la muerte del astro del hip hop y líder vecinal, así como la vida de enfermedad mental y problemas que tuvo el hombre que le disparó.
Tras un retraso en la fecha, el juez de la corte superior H. Clay Jacke II emitió la sentencia para Eric R. Holder Jr., de 33 años, quien fue declarado culpable de homicidio premeditado por la muerte del artista nominado al Grammy, ocurrida en 2019 fuera de la tienda de ropa fundada por Hussle, The Marathon, en el barrio del sur de Los Ángeles, donde ambos crecieron en circunstancias muy similares. Hussle tenía 33 años al morir. “Soy muy consciente de lo que fue presentado como la salud mental del señor Holder”, dijo el juez Jacke. “También he considerado la devastación causada para las víctimas y sus familias. Creo que esta sentencia equilibra ambas”, apuntó.
Luego de un mes de juicio, el jurado también declaró culpable en julio a Holder de dos cargos de intento de homicidio voluntario y dos cargos de agresión con un arma de fuego por los disparos que hirieron a otros dos hombres que se encontraban en el lugar y sobrevivieron. Jacke sentenció a Holder a 25 años sin derecho a libertad anticipada por el asesinato y 25 años más por el agravante de arma de fuego y 10 por agresión con un arma de fuego. Fijó otras sentencias adicionales y ordenó que las otras se purguen de manera simultánea. También le dio crédito a Holder por los casi cuatro años que ha estado en prisión desde el homicidio.
Holder, vestido con uniforme naranja de prisión, miró de frente durante el proceso y no reaccionó cuando se leyó la sentencia. Habló sólo para decirle al juez que comprendía las circunstancias cuando se lo preguntaron.
Hussle, cuyo nombre verdadero era Ermias Asghedom, y Holder se conocían desde que crecieron siendo miembros de la pandilla callejera Rollin’ 60s en el sur de Los Angeles. Ambos eran aspirantes a raperos. Pero Holder nunca tuvo el mismo éxito que Hussle, quien se volvió un héroe local y una celebridad en Estados Unidos. La evidencia contra Holder era tan apabullante, desde testigos a videos de seguridad que registraron su llegada, el tiroteo y su salida, que su abogado aceptó durante el juicio que le había disparado a Hussle.
Pero el abogado de Holder, Aaron Jansen, argumentó al jurado que las circunstancias del tiroteo implicaban que un veredicto menos severo de homicidio voluntario podía ser considerado. El jurado regresó con un veredicto de homicidio premeditado después de seis horas de deliberación. Un año después de su muerte, Hussle fue despedido en un funeral en la arena conocida entonces como Staples Center, y celebrado en una presentación en los Grammy que incluyó a DJ Khaled y John Legend.