Amnistía Internacional solicitó a las autoridades mexicanas a implementar “de manera inmediata” las medidas necesarias para cumplir con la sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, la cual estipula la eliminación de la figura del arraigo y el adecuar la prisión preventiva a estándares internacionales.
Mediante un comunicado, la directora ejecutiva de Amnistía Internacional México, Edith Olivares, señaló lo siguiente: “Amnistía Internacional ha llamado a México a eliminar las figuras de arraigo y prisión preventiva oficiosa de la Constitución y de las leyes por ser contrarias al Derecho Internacional de los Derechos Humanos”. Con este pedido, comentó que no se garantiza que víctimas accedan a la justicia, sino que, por el contrario, se fomenta la reclusión a partir de falsas presunciones o sospechas.
“La sentencia de la CorteIDH marca un precedente histórico para el sistema de justicia mexicana y debe ser prioritario su cumplimiento”, agregó.
Cabe resaltar que la reciente sentencia de la CorteIDH declara a México como responsable internacional por la “violación de los derechos a la integridad personal, libertad personal, a las garantías judiciales y a la protección judicial cometidas en contra de Jorge Marcial Tzompaxtle Tecpile, Gerardo Tzompaxtle Tecpile y Gustavo Robles López en el marco de su detención y privación a la libertad”, ante el proceso judicial que llevaban.
Su caso data de 2006, cuando los hombres viajaban por la carretera México-Veracruz y su automóvil se descompuso. En ese momento una patrulla de la policía se acercó y encontraron elementos que consideraron “incriminantes y eventualmente relacionados con la delincuencia organizada”, según la demanda. Posteriormente, los sujetos fueron interrogados e incomunicados y confinados por más de tres meses con una medida de arraigo hasta que se abrió el proceso judicial. Ellos estuvieron en prisión preventiva por dos años y medio pero sin condena.
Según el Instituto Nacional de Estadística (Inegi) de 2016, la saturación de los penales se debe, parcialmente, por personas que son recluidas sin condena.