Ante la crisis migratoria que se vive en la frontera entre México y Estados Unidos, las autoridades mexicanas enfrentan un desafío para solucionar el problema. En la fronteriza Ciudad Juárez, los más de 20 albergues se encuentran en su máxima capacidad y constantemente a través del tren llegan cientos de indocumentados en su mayoría de procedencia venezolana.
Ante esto, autoridades piden a la ciudadanía no les dé ayuda económica, ya que busca por alguna vía que sean parte de la fuerza laboral.
Hace unos días, se registró una manifestación donde más de 2 mil migrantes, fueron al puente internacional Santa Fe, para exigir a las autoridades estadounidenses que los dejaran cruzar. Ya que llevaban meses intentando conseguir una cita con las autoridades migratorias de Estados Unidos para arreglar su estatus migratorio y no lo lograban.
Ante esta trifulca, el funcionario comentó:”Hay áreas que no tenemos facultad para entrar, pero vamos a dialogar con el Instituto Nacional de Migración, porque debemos de cuidar la ciudad”.