Al menos cinco personas han muerto víctimas del fuego en los virulentos incendios forestales que azotan la región de Biobío. La ministra de Interior, Carolina Toha, indicó que dos de las víctimas “son personas que se desplazaban en un camino principal,” en un vehículo, y otra que hacía lo propio en un camino interior.
La radio local Biobío indicó, por su parte, que según informaciones propias, la cuarta víctima es una voluntaria de bomberos que sufrió un ataque al corazón. La emergencia de la situación se ha agravado con el fuego alcanzado las zonas pobladas y el Ejército movilizado en tareas de evacuación.
Por su parte, el presidente, Gabriel Boric, interrumpió sus vacaciones en la Patagonia, en el extremo sur, para viajar a las zonas afectadas por incendios forestales. Las llamas han destruido más de 8.000 hectáreas, dañado un centenar de viviendas en medio de una intensa ola de calor, y ha obligado a huir a la fauna.
Según el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred) del Ministerio del Interior, hay 37 incendios en combate. Estos se localizan desde la región metropolitana de Santiago hacia el sur, concentrados en las regiones sureñas de Ñuble, Biobío y La Araucanía. Los incendios coinciden con una ola de calor inédita en el sur desde hace décadas y con temperaturas que pueden llegar hasta los 40 grados centígrados.