La junta de supervisores del condado de San Francisco aprobó el usó de robots controlados a distancia. Estos serían utilizados por la Policía en situaciones de emergencia, como pueden ser tiroteos, ataques terroristas o amenazas de bomba.
La decisión de los supervisores se dividió en un voto de 8-3. De está forma, se impuso nuevamente una mayoría que, en setiembre ya permitió mediante otra votación que el Departamento de Policía se conecte en directo a cámaras de videovigilancia privada.
Estos robots ya estaban a disposición de los agentes, sin embargo, la nueva función generó un debate. Los principales críticos consideran que la aprobación aumentará la letalidad de los policías, en un contexto donde la violencia policial es un problema sistémico en Estados Unidos.
Al día de hoy, la fuerza policial de San Francisco cuenta con 17 robots, pero solo 12 de estos están operativos. Estos habrían sido adquiridos entre 2010 y 2017 y son empleadas para tareas en donde los policías corren peligro. Entre estás se cita la detención de criminales armados y violentos, así como la realización de revisiones donde se piensa que puede haber involucrados bombas o artefactos explosivos.