El ataque habría ocurrido la semana pasada contra aldeanos en el este de la República Democrática del Congo. La masacre ha sido atribuida al grupo rebelde M23, así lo anunció este lunes el ministro de Industria, Julien Paluku.
Inicialmente, el ejército había informado de la matanza de al menos 50 civiles en la aldea de Kishishe, en la provincia oriental de Kivu. Sin embargo, el propio gobierno de la Rep. Dem. del Congo elevó la cifra a más de 100. El portavoz del gobierno, Patrick Muyaya, y el ministro Paluku, presentaron las cifras citando datos recopilados por la sociedad civil. El movimiento 23 de marzo, o M23, es un grupo rebelde tutsi predominantemente congoleño que estuvo inactivo durante años.
Por su parte, el grupo rebelde ha rechazado las acusaciones, asegurando que ocho civiles fueron asesinados en la aldea el 29 de noviembre por “balas perdidas”. El movimiento 23 de marzo, o M23, es un grupo rebelde tutsi predominantemente congoleño que estuvo inactivo durante años. No obstante, el grupo armado volvió a activarse en noviembre del año pasado y en junio se apoderó de la ciudad de Bunagana, en la frontera con Uganda.