Al dejar de ser miembros activos de la familia real británica, Harry y su esposa Meghan Markle perdieron la protección policial que se les brindaba a costa de los contribuyentes en el Reino Unido.
Un abogado del príncipe Harry defendió el viernes en Londres que, a pesar de residir en Estados Unidos, el nieto de la reina “siempre” considerará el Reino Unido como “su hogar”, en el marco de un procedimiento judicial para obtener protección policial.
Para poder conservarla, el nieto de la reina Isabel II se ofreció a pagarla de su bolsillo, lo que le fue denegado por el ministerio del Interior, una decisión que ahora impugna ante la justicia.
La pareja, que abandonó el país en 2020 y se instaló en California, donde nació y creció Meghan MarkleP, tiene protección privada en Estados Unidos, pero Harry argumenta que no pueden acceder a la información que necesitan para mantener a su familia a salvo cuando están en suelo británico.
“El demandante no se siente seguro cuando está en el Reino Unido”, argumentó su abogado, Shaheed Fatima, en una vista celebrada en Londres.