Finlandia y Suecia completaron las negociaciones para convertirse en miembros de la OTAN, un mero trámite después de que Turquía levantara la semana pasada el veto a la entrada de Helsinki y Estocolmo en la organización transatlántica.
“Finlandia y Suecia completaron las negociaciones de adhesión en la sede de la OTAN en Bruselas, tal y como acordaron los líderes de la OTAN en su cumbre en Madrid”, indicó la Alianza en un comunicado.
Añadió que en esas conversaciones ambos países “confirmaron formalmente su disposición y capacidad para cumplir con las obligaciones y compromisos políticos, legales y militares de la membresía de la OTAN”.
El diálogo lo mantuvieron funcionarios de la organización transatlántica y representantes de Finlandia y Suecia. La delegación finlandesa la lideraron los ministros de Exteriores, Pekka Haavisto, y de Defensa, Antti Kaikkonen, en tanto que la sueca estuvo encabezada por la titular de Exteriores, Anne Linde, y el de Defensa, Peter Hultqvist.
Como Finlandia y Suecia son democracias consolidadas con unas fuerzas armadas modernas habituadas a cooperar de forma estrecha con la OTAN, las negociaciones que tuvieron lugar en la sede de la Alianza, en Bruselas, fueron un mero trámite.