El equipo que trabaja en el rescate de ocho mineros atrapados desde hace 28 días, tras una inundación en una mina de zinc en el centro de Burkina Faso, informó hoy de que ya se han bombeado unos 40 millones de litros de agua.
Los rescatadores declararon a los periodistas que aún quedan unos 120 millones de litros en la mina, pero que no están obligados a bombear toda esa cantidad de agua en el caso de que los desaparecidos hubieran logrado resguardarse en una cámara de refugio.
Aun así, hasta el momento se desconoce si alguno o todos ellos se encuentra en dicho refugio minero, indicó la radio los Oméga.
El equipo de rescate explicó que la cámara de refugio se encuentra a unos 7,3 metros de altura, pero la distancia real es de 60 metros de galerías, que también contienen agua.
Esta semana, el Gobierno burkinés anunció que los bomberos pronto comenzarán la fase de inmersión para buscar a los desaparecidos, pero esos especialistas aseguraron que no cuentan con un equipo que les permita bucear a gran profundidad.
El pasado domingo, el director de la mina, Hein Frein, declaró a la prensa que “el dispositivo de ventilación de la sala donde podrían estar los trabajadores sigue funcionando con normalidad”, pero reconoció que era “difícil” conocer el estado actual de los trabajadores y la galería en la que se encuentran.