Jill Biden, la primera dama de EE.UU., entró este domingo por sorpresa en Ucrania, donde se encontró con la esposa del presidente de ese país, Olena Zelenska, en una muestra de solidaridad que coincidió con la celebración del Día de la Madre en el país eslavo.
“Quería venir en el Día de la Madre. Pensé que era importante mostrar al pueblo ucraniano que esta guerra tiene que terminar y que ha sido brutal, y que el pueblo de EE.UU. está con la gente de Ucrania”, dijo Biden a los periodistas.
Biden y Zelenska se fundieron en un abrazo, tras el cual la norteamericana le entregó un ramo de flores antes de una reunión privada dentro del colegio, convertido en un refugio temporal para familias que huyen de la guerra.
Las dos mujeres se dirigieron a los periodistas después del encuentro y Zelenska agradeció a Jill Biden por su “valiente” visita a Ucrania.
“Entendemos el valor que se necesita para que la primera dama de EEUU venga aquí durante una guerra, con operaciones bélicas todos los días, con las sirenas aéreas escuchándose todos los días, incluso hoy”, dijo la anfitriona del encuentro.
Jill Biden visitó esa escuela para mostrar su apoyo a Ucrania, coincidiendo con un ataque ruso a un colegio en el este del país que se teme haya dejado decenas de muertos.
En un principio, Biden iba a acudir solamente a un cruce fronterizo entre Eslovaquia y Ucrania, pero responsables de Ucrania y de EE.UU. dieron vía luz verde a cruzar la divisoria al evaluar la situación como segura.
Esta es la última visita a Ucrania de altos cargos de EE.UU. en las últimas semanas, después de las del secretario de Estado, Antony Blinken, y el secretario de Defensa, Lloyd Austin, así como la de la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi.