México es rico en costumbres de todo tipo y, sin importar si somos creyentes o no, las religiosas son las más fascinantes y llamativas.
Esta tradición que sucede entre los meses de marzo y abril reúne a miles de creyentes católicos en todo el territorio. Pese a que la base es la misma (conmemorar la pasión, muerte y resurrección de Cristo), hay algunos lugares que realizan acontecimientos únicos. Ya sea que te lances de último momento o que lo planees mejor para el próximo año, aquí tienes algunas tradiciones y rituales que destacan y con los que podrás ver esta festividad con otra perspectiva.
1. La Pasión de Cristo en Iztapalapa, CDMX
Dicen por ahí que chilanga que se respeta ha ido al viacrucis de Iztapalapa en la CDMX. Es que sí es “casi una experiencia religiosa” por la enorme cantidad de personas que asisten a verlo. Este 2022 se celebra la 179 representación teatral de la Pasión de Cristo; esta se realiza en las calles de Iztapalapa y culmina en el Cerro de la Estrella. En ella participan ciento de personas de la comunidad tanto como actores y actrices, como para crear los vestuarios y todos los materiales de utilería. Es tan importante que ha llegado a juntar a dos millones de personas y hasta se transmite en televisión nacional anualmente.
Para hacer la Pasión de Cristo las personas ensayan durante semanas y algunas hasta pasan por arduos entrenamientos. Por ejemplo, hay requisitos muy específicos para conseguir el papel de Cristo: ser oriundo de uno de los ocho barrios de Iztapalapa, medir más de 1.75 metros, tener la primera comunión, no tener tatuajes y gozar de buena salud. Axel será quien lleve tan importante rol este 2022 y le confirmó a Cuartoscuro que tiene una rutina de entrenamiento de cuatro horas diarias. En ellas se incluye cargar mínimo unas dos horas una cruz de madera que pesa más de 80 kilogramos.
2. Tewerichic en la Sierra de Chihuahua
Como se sabe, hay muchas celebraciones católicas que se mezclaron con las de culturas prehispánicas para crear algo único. Un claro ejemplo de ello es lo que se vive en Chihuahua, que es de las tradiciones de Semana Santa en México más particulares.
Esta es realizada por la comunidad rarámuri que habita en la sierra, pues la Semana Santa católica coincidió con el culto que las comunidades tenían a las deidades de la luna y el sol. Ambas tradiciones se mezclaron y hoy en día vemos el Tewerichic, un ritual donde se realiza una danza que representa la lucha entre el bien y el mal. Esta resulta en la victoria de soldados aliados de Dios sobre los guerreros del diablo.
3. La Pesca de la Sardina Ciega en Tapijulapa, Tabasco
Hablando de tradiciones indígenas que se combinaron con la Semana Santa, no dejes de presenciar este extraordinario ritual que se realiza cada año en el pueblo mágico Tapijulapa en Tabasco. Se hace en honor a las deidades de la lluvia, agua, tierra y la luna y se realiza en las albercas naturales que se forman en la Cueva de las Sardinas Ciegas para pedir por cosechas, pescas y lluvias abundantes. Al ritmo de tambores y flautas, y luego de realizar una peregrinación por la selva, los indígenas zoques danzan en círculos y con canastos en las manos pescan las sardinas.
4. Procesión del Silencio en San Luis Potosí
Otra de las tradiciones de Semana Santa en México muy famosas es la Procesión del Silencio que se realiza en San Luis Potosí que se desarrolla cada Viernes Santo desde 1954. Aquí también hay un se representa la pasión y muerte de Cristo, pero abunda la solemnidad y el misticismo. La salida es de las puertas del Templo del Carmen, donde un grupo de tambores anuncia el inicio de esta marcha y no dejan de tocar hasta el final de la celebración y destacan en medio del silencio de la procesión.
Después, salen las cofradías (congregación), que suelen ser unas 30 y cada una usa un color distinto. Pero lo que llama la atención de muchas personas son los encapuchados, cuya vestimenta representa luto y humildad.
5. El Día de la samaritana en Oaxaca
Oaxaca tiene otra de las tradiciones de Semana Santa en México únicas en el mundo: el Día de la Samaritana. Este se celebra cada cuarto viernes de Cuaresma y consiste en regalar aguas de sabores. Esta acción hace referencia al pasaje bíblico donde Jesús le pide agua para beber a una mujer Samaritana. Dicen que esta tradición nació en el siglo XIX cuando los párrocos comenzaron a regalar a agua a las y los devotos. Sin embargo, ahora no solo personas católicas son partícipes, pues se puede ver que regalan agua en iglesias, parques, sitios públicos y también en algunos comercios.
6. Los Fariseos en el Norte de México
En Sonora, Chihuahua, Sinaloa y hasta Durango es común que cada Cuaresma salgan los llamados “fariseos”, personajes que fueron introducidos a la cultura mexicana por los jesuitas en la época colonial. Ellos tienen la encomienda de representar el mal, por lo que es común que vistan máscaras que asemejan demonios y algunas están hechas con piel de animal. Su vestimenta también se caracteriza por los cascabeles que usan en brazos, piernas y cintura.
Muchos de los fariseos son personas que guardan alguna penitencia y al final de la cuaresma se realiza la quema de las máscaras para celebrar a los hombres detrás de estas figuras y para presentar que inician un nuevo ciclo libre de pecado.