Quintana Roo fue la entidad con mayor reducción de la movilidad en todo el país, lo que permitió que menos gente se enfermara y se salvaran muchas vidas.
Tras el descenso de contagios de Covid-19, hospitalizaciones y defunciones por la pandemia y permanecer varias semanas en semáforo verde, el gobernador Carlos Joaquín González anunció este domingo en un mensaje a través de la televisión estatal que el uso del cubrebocas en espacios abiertos o al aire libre ya no será obligatorio.
Tras hace un recuento de dos años de la pandemia, el gobernador de Quintana Roo expresó que es momento de valorar los esfuerzos realizados y hacer un reconocimiento a lo que juntos, como sociedad y gobierno, se ha logrado. Agradeció a cada quintanarroense que decidió sumarse a las iniciativas, programas y trabajos que permitieron llegar a buen puerto.
“Sé que comparten conmigo la satisfacción de haber llegado a esta etapa de semáforo verde después de superar muchas adversidades. Nos encontramos ante un nuevo escenario, que por mucho tiempo pareció lejano” agradeció. Para salvar vidas, recordó, se aumentó 600% la infraestructura hospitalaria; pasamos de 300 a casi 1,000 camas para pacientes Covid; se contrataron 716 profesionales de la salud; se capacitó y dotó de equipo de protección a 26 mil personas de la primera línea de atención como médicos, policías y personal de servicios públicos y abasto.
El uso de cubrebocas no será necesario cuando se realicen actividades físicas como ejercitarse o pasear. Pese a ello sí será obligatorio su uso en el transporte público, en espacios cerrados, y en lugares donde haya mucha gente, como los mercados, cines o ferias. Además, el personal médico, junto con el de servicio, como restaurantes, deberá seguir con le uso del cubrebocas mientras están realizando sus labores. Gonzáles agregó que se ampliarán los horarios en establecimientos, sin especificar cuales, con la finalidad de brindar un mejor servicio a los visitantes.