CDMX: Jacarandas y magnolias reemplazarán palmeras muertas

La Secretaría de Medio Ambiente informó que se derribarán 500 palmeras que murieron por enfermedades o plaga.

La Secretaría de Medio Ambiente (Sedema) de la Ciudad de México informó que serán derribadas 500 palmeras muertas debido a que presentaron enfermedades o muérdago; sin embargo, no todas serán sustituidas por el mismo ejemplar, sino por arbolado de diversos tipos. Isidro Recillas Silva, subdirector de Diseño y Evaluación de Proyectos de la Sedema, indicó que no todas las 500 palmeras serán sustituidas por otras palmeras, pues podrían ser jacarandas, magnolias o encinos las que tomen su lugar.

“No estamos hablando de que las 500 tengan que ser palmas. Estamos buscando mayor diversidad de especies para romper esos ataques de plaga a monocultivos. Estamos hablando de una paleta vegetal de seis u ocho especies, entre jacarandas, magnolias, bahuinias, astronómicas y encinos. En algunos lugares en donde la palma sea un ícono consideraríamos establecer alguna palma”, precisó el funcionario.

Los ejemplares, que así se decidan, serán sustituidos por la palmera washingtonia, la cual es más tolerante y resistente a plagas. Además, estás tendrán alturas de cinco a siete metros para facilitar su monitoreo, pues, debido a que actualmente alcanzan hasta los 18 metros, se complican estas labores. Además del derribo y sustitución de las 500 palmeras, también se contempla realizar podas sanitarias a 12 mil de estas (en total hay 15 mil en la capital), con el fin de mejorar su salud y evitar su muerte.

La titular de la Sedema, Marina Robles García, informó que dentro del plan de saneamiento se realizará la sustitución de cinco mil árboles y 20 mil podas sanitarias o preventivas. Todo esto con una inversión de 60 millones de pesos. Asimismo, indicó que hay 3.5 millones de árboles y 15 mil palmeras en la capital, de los cuales 30 por ciento (1.1 millones) presenta declinación severa por plagas y enfermedades, por lo que a este número se le brindará saneamiento. Finalmente, mencionó que estos trabajos durarán aproximadamente cinco años, ya que la sustitución debe llevarse con tiempo para la seguridad de los ejemplares, por lo que este 2022 se proyecta el derribo de 100 palmeras y mil árboles.