Un juez falló este viernes en contra de la demanda del grupo de derechos electorales creado por Stacey Abrams, Fair Fight Action. La querella desafiaba el sistema de votación del estado de Georgia para cambiar la forma en cómo se administraba las elecciones.
La demanda fue presentada después que Abrams perdiera la elección contra el actual gobernador Brian Kemp. En ese momento se acusó de “malas conductas, fraude o irregularidades” en el proceso de votación. Luego de conceder la elección, la demócrata anunció que presentaría la demanda federal que impugnaba la “mala gestión grave” de las elecciones.
El juez federal de distrito, Steven Jones, anunció que las prácticas impugnadas no violan ni la constitución ni la Enmienda de los derechos electorales. Mediante un comunicado, Abrams aseguró que a pesar del fallo, el caso “tuvo resultados medibles”, entre ellos un cambio en la política de votación.
La actual candidata a la gobernación indicó que se logró crear una plataforma para que los votantes afroamericanos exijan una mayor equidad en el estado. Según la política, 22,000 personas también recuperaron su capacidad para votar y la batalla contra la persistente supresión de votantes.
El secretario de Estado, Brad Raffensperger, el acusado principal, aseguró que las afirmaciones de la candidata es solo una retorica probada por encuestas. Además, aseguro que esta no está respaldada por hechos ni pruebas.